Fotografías, cortesía de Víctor Silva
Se llevó a cabo una mega sesión fotográfica con mamás de niñas y niños con discapacidad o necesidades de cuidados intensivos 24/7.
El Centro Samuel Ruiz de Derechos Humanos A.C. en Coordinación con el Colectivo Cuidadoras Potosinas, realizó una sesión fotográfica para festejar este diez de mayo a las mamás que han dedicado su vida al cuidado de algún hijo o hija con discapacidad.
La convocatoria tuvo buen recibimiento y participaron diez mamás, con sus respectivos hijos, siendo los fotógrafos, Víctor Silva, Ricardo Sánchez, Dante Gamboa y Gabriela Isabel Sánchez, quienes llevaron a cabo una maratónica jornada de fotografía en estudio profesional.
En la producción también participó la artista potosina Hortencia Govea quien realizó la técnica de Body Paint, con ilustraciones en el rostro de las bellas mamás, quienes dieron ideas para imprimir la alegría de ser madre y también el reto que implica atender a un hijo o hija con discapacidad.
Los fotógrafos, preparados con su iluminación, fondos y dirigiendo a las mamás modelos, se vieron sorprendidos por la disponibilidad y alegría de los hijos que acompañaban a sus mamás y realizaban poses de verdaderos modelos para dejar su imagen plasmada en las fotografías que compartimos como galería.
La sesión fotográfica también pretende visualizar el trabajo no remunerado que día a día realizan las madres en favor de sus hijas e hijos, para quienes con discapacidad de nacimiento o adquirida, realizan los mejores esfuerzos de mantenerles con una vida de la mayor calidad.
A todas las mamás, El Centro Samuel Ruiz de Derechos Humanos les desean un feliz 10 de mayo, de forma primordial a las mamás especiales, con hijos extraordinarios, quienes plasmaron un pensamiento, lo que se comparte para la reflexión de la sociedad.
Nadia, Baudel y Santhiago.
Nadia Arzola…»¿Cada avance nos hacía tocar el cielo, deje de preguntarle a Dios por qué? por el para qué?
Hace 14 años y 3 meses que la maternidad llegó a mi vida y con ella una maternidad «especial». Mi Bau, llegaste inesperadamente pero más inesperado el diagnóstico que te acompañaría desde tu nacimiento y por toda la vida. Fue difícil, doloroso y muchas veces lo creí injusto, tantas otras me preguntaban; ¿por qué a ti? Me enseñaste a ser mejor persona, a conocerme, a sacar fuerzas en cada prueba. Contigo se me despertó el hambre por aprender más sobre tu condición, las ganas de ayudar y aceptar las diferencias como algo natural en esta vida. El caos pasó a ser parte de nuestras vidas y cada avance nos hacía tocar el cielo. Después de algunos años, siete para ser exactos, llegó tu hermano Santhiago y entonces otro giro de 180° nos volvió a dar la vida con un diagnóstico similar al tuyo, pero con más complicaciones. Mi pequeño Santhi, estuvimos a punto de verte partir al cielo, pero desde pequeño nos demostraste lo que es aferrarse a la vida, a pesar de tus tantas convulsiones y padecimientos, sonríes como si nada pasara. Y es entonces que los veo a ambos y sé que no puedo darme por vencida cuando tengo su sonrisa que me inspira. La maternidad en su forma más bella y especial era mi estilo normal de vida, sinceramente no había valorado todo lo que he hecho por ustedes, muchas veces me sentí tan poca cosa como su madre pues creía que merecían algo mejor, y cuando más mal me sentía llegó Mathias a nuestras vidas, hasta ahora un niño «neurotipico» que vino a mostrarme la maternidad «normal» y gracias a eso pude darle valor y sentido a lo que una madre con hijos especiales como tú mi Bau y mi Santhi hace, sin duda no es fácil tener un hijo con discapacidad mucho menos dos y entendí que todo lo que hemos logrado, gran parte se debe a mis cuidados, hoy gracias a ustedes tres veo la vida desde diferentes perspectivas y me aplaudo, puedo decir que soy mi fan número uno porque gracias a todo lo que he vivido a través de ustedes he y sigo evolucionando para convertirme en la mejor versión. Dejé de preguntarle a Dios el por qué y entendí el para qué. Si me tocara volver a nacer solo le pediría a Dios que ustedes tres mis hijos vuelvan a ser. Gracias Santhi y Bau por convertirme en una super mamá y gracias Mathi por enseñarme la diferencia entre la maternidad.
Fran y Marijo
Fran Castor…»He comprobado que también podemos ser felices en la montaña»
Tú me has enseñado a ser tan fuerte como tú, desde tu nacimiento y tu primer mes de vida que estuviste tan delicada de salud, tuve sacar fuerzas que no sabia que tenía, por qué tenía que estar bien para ti, tú te aferraste a la vida y lograste salir del hospital, después con tu diagnostico se me vino el mundo encima, con mucha Fe y buscando opciones logré que pudieras escuchar por primera vez lo tanto que te amo, y así como tu aferraste a la vida, así seré de aferrada para llegar a nuestra meta tan anhelada, aunque vamos lento y el camino no es fácil, lo importante es que en el camino estamos.
¡Al ver tu sonrisa todos los días y los logros que vas teniendo me has demostrado y he comprobado que también podemos ser felices en la montaña!
Brendys García y Jeremy.
Brendys García…»El día que me enteré de tus condiciones, solté el mundo y tomé de tu mano»
Mi rey tus diagnósticos me enseñaron a escuchar y a comunicarnos con un idioma diferente entre los 1000 idiomas que existen, solo tu y yo sabemos hablar con la mirada y escuchar con el corazón, me enseñaste a ser resiliente y adaptarme a un nuevo estilo de vida dejando atrás todo, el día que me enteré de tus condiciones solté el mundo y tomé tu mano, juntos hemos desafiado muchas cosas, te amoooo mi guapo tal cual eres, y siempre estaremos para apoyarte tu papá, tu hermana y tu mamá.
Ana Cecilia Alviso y Emily Nicole
Ana Cecilia Alvizo…»Me ofrecían cuidarte para yo descansar, pero siempre te quería a mi lado»
Mi pequeño gran milagro cuando naciste pesaste solo 620 gramos🥺. Eras la boronita más pequeña que mis ojos habían visto. Los doctores me advirtieron que estabas muy chiquita, que necesitarías más atención, más cuidados y unos días más en el hospital🏥. Para mi eras perfecta, te veía chiquita y muy frágil pero nunca me dio miedo cargarte en mis brazos. Las enfermeras👩⚕️ ofrecían cuidarte para yo descansar, pero yo siempre te quería a mi lado. Tu llegada a este mundo fue lo más difícil que he vivido, pero lo logramos juntas. Tú me enseñaste a ser fuerte, valiente y no temerle a nada. Ahora que veo que poco a poco vas creciendo, como desafías las expectativas y lo sorprendido que están los médicos con tu desarrollo me doy cuenta que realmente eres un milagro de dios🙏🙏❤.
Te amo princesa 👑 👧🏼🦻🥰
Y ahora que logramos que nos puedas escuchar por primera vez fue algo realmente sorprendente y sé que un día comprenderás lo mucho que te amamos tu papi, tu mami y tus hermanos 👧🦻🥰
Claudia Méndez y Mati.
Claudia Méndez…»Mi Mati, fuiste mi maestro de vida, esperaré nuestro reencuentro en el cielo»
Fuiste mi mejor maestro el que me enseñó a ver el miedo desde otro enfoque me preparaste para ser la mama fuerte que tu necesitaste… Gracias por las enseñanzas y los bellos recuerdo que dejaste en mi alma y mi corazón tu mami siempre piensa en ti.
Paloma Cantero y Sebastián:
Paloma Cantero…»Renuncié a mi vida laboral y profesional para darte una vida de calidad»
Hijo mío al nacer y saber de tu condición eso pasó a segundo plano ya q tu vida pendía de un hilo, con el tiempo me di a la tarea de empaparme sobre tu condición, me convertí en tu enfermera, maestra. Contigo aprendí a ser paciente y a disfrutar cada instante de la vida, renuncie a mi vida laboral y profesional para darte una vida de calidad, y ver que lo estoy logrando me llena de satisfacción.
Si mi día se torna gris o amargo, tú lo haces de colores con tus besos tus abrazos y cuando te escucho decir te amo.
Ma. del Carmen Rivera y Gerardo
«Mi vida cambio al grado de volverme enfermera, maestra y trabajadora no remunerada»
Mi Amor cuando naciste y me dijeron que eras un niño milagro mi vida dio un cambio gigante era una zozobra cada día pero al ver tus ganas de vivir solo pedí a Dios que se hiciera su voluntad, y con el paso de los días fuiste mejorando pero al igual tu diagnostico no fue el mejor pensar que no podrías moverte, me motivo a buscar que hacer por ti no me conforme y con el paso del tiempo empecé a ver tus movimientos y eso no tiene precio, ahora te veo muy diferente al diagnóstico que nos dieron y me siento orgullosa de ti, pero también agradezco a tu hermano Luis y tus abuelos por la ayuda y pues mi vida cambió al grado de ser enfermera, maestra y además trabajadora para que en la medida de mis posibilidades no les faltara nada, ahora agradezco y doy gracias a Dios cada que me dices te amo mamá.
GRACIAS MI GRAN GUERRERO. TE AMO MAS
Olivia Noriega y David.
Olivia Noriega…“Querido y amado hijo David…eres esa estrella que día a día ilumina mi vida»
Saber que te esperaba, era algo incierto y complicado para mí pero en cuanto te tuve en mis brazos y verte tan pequeño y frágil me dieron fuerzas para no dejarme vencer por más obstáculos que tuviéramos, fueron años muy difíciles pero verte dar tus primeros pasos, me alentó a no dar me por vencida, cada sonrisa tuya y tus ganas de no dejarte vencer eran mi fortaleza cada día, hemos pasado tantas bellas cosas y aunque algunas no tanto, eso jamás nos ha dado una razón para dejar de salir adelante, eres esa estrella que día a día ilumina mi vida
Sandra Macareno Gracias y Brian
Sandra Macareno… «A veces quisiera tirar todo por la borda, veo tu carita y saco fuerza de dónde no la tengo»
Eres lo mejor que me pudo haber pasado hijo no lamento todo lo que he vivido contigo me enseñaste a no rendirme jamás aunque hay veces que quisiera tirar todo por la borda, pero veo tu carita y saco fuerzas asta de donde no se puede, pero me vuelvo a levantar, no me arrepiento de todo lo que he tenido que sufrir y vivir y si me volviera pasar lo mismo lo volvería a hacer sin pensarlo, porque te amo con todo mi ser.
Doy gracias a dios por ser tu mama y por enseñarme a ser cada día más fuerte y enfrentar las cosas más difíciles que nunca pensé enfrentar.
Los Amo.
Mariana y Mathías
Mariana Noriega…»Tú misión de vida la conocí por las flores y espinas que mi rostro reflejan día a día en mi cuerpo y mente dedicados a tu cuidado”.
Llegaste sano a mi vida y una omisión de cuidados de quién debía protegerte nos cambió la vida con un golpe certero y brutal. Mi niño bello, el que me llevo a estudiar temas que nunca pensé me interesarían, a dedicar toda mi atención, tiempo y energía para cubrir tus necesidades. Con tu historia conocí lo mejor y peor que los seres humanos dan a los demás y he llegado a casa derrotada y llena de dolor, ese dolor que solo recostándome a tu lado puede reponerse y contenerse en medio de tu mirada que me envuelve en su frágil paz 🕊️.