París. Hay tiempos imperceptibles para el ojo humano, fracciones de segundo que sin saberlo pueden ser vitales. Ahora, una diferencia ínfima de cinco milésimas fue determinante para que el estadunidense Noah Lyles conquistara el oro en los cien metros planos ante el jamaiquino Kishane Thompson, un episodio épico en la historia olímpica.
En términos deportivos es un photo finish o una carrera épica. Lyles y Thompson parecían haber cruzado la meta en el mismo instante, pero un impulso le permitió al estadunidense meter el torso para ser campeón.
Ambos terminaron con igual crono, 9.79 segundos, y tras unos momentos de suspenso, que recorrieron la pista, las gradas e incluso rincones al otro lado del mundo, se anunció en los marcadores que Lyles había sido ligeramente más rápido. El crono preciso del estadunidense es 9.79.784 ante los 9.79.789 del jamaquino, que debió conformarse con la plata.
Fue la prueba más cerrada en 100 metros desde Moscú 1980. En ese momento, el británico Allan Wells superó por muy poco al cubano Silvio Leonard en una era en la que el conteo no iba a las milésimas.
En una competencia en la cual por primera vez los ocho finalistas corrieron por debajo de los 10 segundos, Fred Kerley se apoderó de la presea de bronce con 9.81; sin embargo, todos quedaron lejos del récord de la leyenda Usain Bolt, quien impuso en 2009 un tiempo mundial de 9.58 segundos.
No tenía la impresión de haber ganado. Fue un momento de locura; creía realmente que él había ganado. Cuando vi mi nombre en el marcador fue algo increíble. Estoy orgulloso de haber triunfado ante atletas tan rápidos
, celebró Lyles. Es la carrera más bonita de mi vida
, agregó Thompson.
La victoria de Lyles regresa a Estados Unidos a lo más alto del podio en la prueba reina del atletismo desde Atenas 2004 cuando Justin Gatlin ganó la medalla de oro.
El triunfo también es un mensaje de superación por parte del propio Noah, quien reveló en 2020 que tomaba antidepresivos y estaba en terapia. Así se convirtió de manera indirecta en un activista en favor de la salud mental, en un momento en el cual el tema ganaba reflectores.
La velada atlética también estuvo engalanada por la final de salto de altura femenil, en la cual la nueva plusmarquista mundial, la ucrania Yaroslava Mahuchikh, consiguió el oro que le faltaba con una marca de 2.00 metros. La australiana Nicola Olyslagers obtuvo la plata, mientras el bronce fue compartido para la ucrania Iryna Geraschenko y la australiana Eleanor Patterson, ambas con 1.95 metros.
El canadiense Ethan Katzberg, campeón mundial, se impuso en el lanzamiento de martillo con una distancia de 84.12 metros. La única noticia desafortunada en la jornada fue la baja imprevista del bahameño Steven Gardiner, quien buscaba revalidar el título en los 400 metros.
EU: rey en la natación
Estados Unidos ganó la prueba de relevo 4×100 combinados femenil con récord del mundo de 3:49.63 para coronarse campeón general de la natación en París 2024 con ocho oros –dos de ellos de la emblemática Katie Ledecky–, uno más que Australia.
En la última jornada de esta disciplina, el estadunidense Bobby Finke se impuso en los mil 500 metros estilo libre con un récord mundial de 14:30.67, mientras la sueca Sarah Sjoestroem venció en los 50 metros estilo libre.
China, que se ha visto salpicada en un escándalo de dopaje, sorprendió al ganar el oro en el relevo combinado masculino de 4×100, poniendo fin a la racha de dominio estadunidense que se remonta al debut de la prueba en los Juegos de Roma 1960.
Memorable para Chile
Francisca Crovetto se impuso en la prueba de skeet de tiro deportivo para convertirse en la primera chilena en la historia en conseguir una presea dorada individual en Juegos Olímpicos, además de romper una sequía de 16 años sin medallas en una justa veraniega.
También es el primer metal dorado de Chile en este deporte y la tercera presea áurea en su historia olímpica, tras las obtenidas por los tenistas Fernando González (dobles) y Nicolás Massú (singles y dobles) en el tenis de Atenas 2004.
Kristen Faulkner es la primera estadunidense en ganar el oro en el ciclismo de ruta olímpico desde que lo hiciera Connie Carpenter en Los Ángeles 1984, cuando fue el debut de esta disciplina en una justa veraniega. Faulkner culminó 58 segundos por delante de la holandesa Marianne Vos y de la belga Lotte Kopecky, quienes lograron una competencia con otro final de fotografía, en la que la primera se llevó la plata y la segunda el bronce.
En el golf, el estadunidense Scottie Scheffler, ganador de seis torneos en la gira de la PGA este año, remontó una desventaja de cuatro golpes para coronarse por delante del británico Tommy Fleetwood, quien fue plata.
Mientras la amazona alemana Jessica von Bredow-Werndl sumó su segundo oro en París en la final individual de la doma clásica en equitación.
En tanto, China afianzó su hegemonía en el tenis de mesa, al ganar el torneo individual masculino con Fan Zhendong.
Los taiwaneses Chi-Lin Wang y Yang Lee conquistaron el oro en el torneo de dobles masculino de bádminton.