Bogotá. El presidente de Colombia, Gustavo Petro, pidió esta noche en un mensaje en cadena nacional a la fiscalía investigar la compra de un sofisticado software de espionaje de una empresa israelí que habría adquirido la policía colombiana en 2021 por 11 millones de dólares para espiarlo a él y a otros opositores, mientras en distintas ciudades del país un paro camionero, en rechazo a un aumento en el el precio del diesel cumplió tres días.
La denuncia del mandatario se refiere al software Pegasus, de la firma NSO Group, que fue relacionado con el espionaje a activistas de derechos humanos, periodistas y políticos, desde México hasta Arabia Saudita.
Petro, quien antes ha denunciado haber sido víctima de interceptación de sus comunicaciones cuando era opositor y después como candidato presidencial en 2022, sugirió que ese software fue utilizado para vigilar a los detractores del entonces gobierno de Iván Duque (2018-2022).
“¿Cómo salen del país 11 millones de dólares en efectivo en un avión, o en dos, desde oficinas estatales de la Dipol (Dirección de Inteligencia Policial) hacia Israel para comprar un software que espía celulares, comunicaciones privadas… quizás durante meses, los del principal partido de oposición de entonces?”, cuestionó el mandatario tras leer una carta que, advirtió, era confidencial y sólo usada para fines de inteligencia.
El documento que leyó, pero no difundió a la prensa, habría sido una respuesta de la unidad de investigaciones financieras de Suiza a una solicitud de información de su par colombiana fechada en agosto de 2024. Petro aseguró que dado que la misiva tenía un contenido sensible que no podía ser difundida sin previo consentimiento de la autoridad de prohibición de lavado de dinero de Israel.
El mandatario afirmó que pasó por alto la prohibición porque rompió desde mayo pasado las relaciones diplomáticas con Israel, en rechazo al “genocidio” que perpetra en Gaza.
En la carta se informa que la policía colombiana habría hecho en 2021 dos pagos en efectivo en un banco de Tel Aviv, cada uno por más de cinco millones de dólares, a la firma NSO Group.
“Ubiquémonos: es antes de las campañas que comienzan en octubre del 2021, tanto para Congreso como para consultas presidenciales, y estamos en medio del estallido social en Colombia”, comentó el mandatario en referencia a las multitudinarias manifestaciones que se desarrollaron contra el gobierno de Duque.
“¿A quiénes más interceptaron? ¿Con qué orden judicial para que esas interferencias no sean delito? ¿De dónde salió el dinero?”, cuestionó.
Petro pidió desde enero de 2023 una investigación por posibles interceptaciones ilegales a raíz de una investigación periodística, según la cual un grupo de oficiales con conocimientos en ciberinteligencia presuntamente penetraron su campaña. Fruto de esa presunto espionaje salieron a la luz videos de reuniones privadas de los estrategas de la campaña y Petro.
Se esperaba que en su alocución se refiriera a la protesta de transportistas de carga por el alza del precio del diésel, pero sólo lo calificó de “empresarial, (que) en inglés se llama lock-out” y que “tiene intereses oscuros económicos y políticos”.
Su gobierno elevó ayer un “llamado urgente” para que los transportistas de carga y autobuses que protestan contra el alza en el precio del diésel habiliten “corredores de abastecimiento”, ante alertas de escasez de alimentos en varias ciudades, como Bogotá, Bucaramanga, Cali, Nariño y Boyacá.