Desde 1984 ha ocupado diversos cargos en la función pública y tiene un recorrido de 35 años en el Poder Judicial del Estado
La basta experiencia de la nueva fiscal general del Estado, María Manuela García Cázares, es su carta de presentación y fue parte fundamental para que el Congreso del Estado la eligiera para el cargo que ocupará desde hoy hasta el 22 de mayo del 2031.
García Cázares fue electa por unanimidad de una terna en la que estaban incluidos Ranulfo Rodrigo Cano y Luis Ricardo Molina.
La nueva fiscal, durante su último cargo se desempeñó como Magistrada Numeraria y Presidenta del Supremo Tribunal de Justicia del Estado (STJE) y del Consejo de la Judicatura.
García Cázares inició su carrera profesional en 1984 en el Poder Judicial del Estado, donde ha ocupado diversos cargos, además está familiarizada con la dinámica de la Fiscalía General del Estado (FGE), toda vez que ocupó el cargo de procuradora general de Justicia del Estado de 1998 al 2000.
La fiscal general del Estado, que en este año cumple 40 en el servicio público, 35 de estos han sido en el Poder Judicial del Estado, donde se ha desempeñado en diversos cargos de carrera judicial, desde secretaria de Estudio y Cuenta, Jueza y Magistrada ratificada; mientras que en el Consejo de la Judicatura fungió como secretaria ejecutiva de Pleno y Carrera Judicial; secretaria ejecutiva de Vigilancia y Disciplina; además de directora del Instituto de Estudios Judiciales, hoy Escuela Judicial. En la docencia, ha sido catedrática en la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí por más de 30 años.
Las primeras medidas que se adoptaran de carácter institucional, es la modificación o actualización del Plan de Persecución Penal, para que esté acorde a los reclamos de procuración de justicia en San Luis Potosí, expreso García Cázeres durante su primer entrevista como nueva titular de la FGE.
García Cázares recordó que siguen inmersos, en un proceso de evolución y consolidación del sistema penal, soportado en el modelo acusatorio. Además, esa transición que proviene del sistema inquisitivo a la oralidad, requiere que se avance en la capacitación constante del Ministerio Público, como también de los litigadores de la propia Fiscalía General del Estado.
Consideró que la profesionalización institucional, es lo que ha permitido reducir en manera sustancial, la incidencia del fenómeno de la puerta giratoria. Comentó García Cázares que como titular de la FGE, se hará una revisión exhaustiva de los expedientes que siguen pendientes, aún los del sistema tradicional, para darles seguimiento, y lograr su judicialización respectivamente.