Ciudad de México. En su primera conferencia de prensa como coordinadora de defensa de la transformación, Claudia Sheinbaum dijo que Marcelo Ebrard “claro que puede ser puede ser parte del gabinete” o coordinador en el Senado o en la Cámara de Diputados, como se definió en el acuerdo alcanzado desde que inició el proceso. Insistió que “siempre está la mano tendida para que Marcelo sea parte de Morena”.
Previo a la entrega del bastón de mando del movimiento que esta noche le dará el presidente Andrés Manuel López Obrador, en un restaurante del centro histórico, la morenista adelantó que será en un encuentro privado. “Vamos a estar a la altura de las circunstancias, porque siempre vamos a llamar a la unidad y a construir no solamente el movimiento si no el triunfo de lo que viene hacia delante”.
Se conoció que será a las 19:00 horas.
Anticipó que será una ceremonia «muy emotiva” y reiteró su exhorto a trabajar ahora en la unidad.
Acompañada del presidente del partido, Mario Delgado, llamó a no hablar de “división” en este momento, ya que recalcó que se trata de “un proceso. Hay que hablar siempre de unidad, nuestro movimiento así se hizo en 2018”.
La ganadora del proceso interno de Morena, quien eventualmente asumirá la candidatura presidencial de la cuarta transformación, se reunió este día en la sede del partido con la dirigencia del instituto y cuatro de los aspirantes en este proceso: Adán Augusto López, Ricardo Monreal, Gerardo Fernández Noroña y Manuel Velasco.
Pidió al partido iniciar de inmediato la instalación de la mesa para concretar formalmente la alianza con el PT y el PVEM para ampliar la alianza y lograr la meta de 33 millones de votos. A la vez, “iniciar con una agenda mucho más agresiva en formación de los comités”, refirió Mario Delgado.
Consultada sobre la importancia de recibir esta noche el bastón del movimiento de manos del titular del Ejecutivo, expresó que “somos un movimiento de transformación. Imagínense, es un privilegio, una responsabilidad recibir del presidente Andrés Manuel López Obrador, que ha sido el dirigente de este movimiento durante tantos años, recibir ese bastón de mando. Es un orgullo, un privilegio.
Bajo el lema de “unidad y movilización”, afirmó que tras el proceso, n hay una operación cicatriz. Por el contrario, visualizó que hay mucho entusiasmo entre los simpatizantes del partido.
Delgado Carrillo sostuvo que Sheinbaum llega con una legitimidad que ningún candidato había tenido antes. “Viene de una decisión del pueblo, no como en enfrente que dan el dedazo de oligarquia y forman un circo. Nosotros enterramos para siempre el dedazo”.